Durante el embarazo, los niveles elevados de estrógenos prolongan la fase de crecimiento del cabello (fase anágena), lo que a menudo se traduce en una melena más abundante y brillante. Sin embargo, después del parto, los niveles hormonales se reajustan drásticamente, provocando que una gran cantidad de folículos pilosos entren en fase de reposo (fase telógena). Esto da lugar al efluvio telógeno postparto, una forma temporal de caída de cabello que suele manifestarse entre 2 y 4 meses después del parto.
Efluvio telógeno postparto: causas y síntomas
El efluvio telógeno postparto se caracteriza por una caída de cabello difusa, es decir, que se produce de forma generalizada en todo el cuero cabelludo. Es posible que notes más cabellos de lo habitual en el cepillo, la almohada o la ducha. Si bien puede resultar alarmante, es fundamental recordar que este tipo de caída de cabello postparto es un proceso natural y reversible en la mayoría de los casos, ya que, en general, el cabello vuelve a crecer en un plazo de 6 a 12 meses.
Relación entre la caída del cabello y la lactancia
Aunque no existe una relación directa entre la lactancia materna y la caída del cabello postparto, algunas mujeres pueden experimentar una mayor caída durante este periodo. Esto se debe a que la producción de leche materna requiere un gran gasto energético y nutricional, lo que puede influir en el ciclo de crecimiento del cabello. Si te preocupa la caída del pelo relacionada con la lactancia, consulta con un especialista para obtener asesoramiento personalizado.