Explicar cómo se puede incluir en la rutina, utilizando niacinamida por las mañanas y ácido salicílico por las noches.
Una de las principales preguntas que surgen en relación al ácido salicílico y la niacinamida es si se pueden combinar. También son frecuentes las dudas sobre si incluir en una misma rutina de cuidado facial ácido salicílico y retinol.
Sí, en muchos casos, se pueden combinar ácido salicílico, niacinamida y retinol en una rutina de cuidado de la piel. Sin embargo, es importante tener en cuenta algunas consideraciones para maximizar los beneficios y evitar posibles irritaciones. Aquí hay algunas pautas generales para combinar adecuadamente ácido salicílico, retinol y niacinamida:
● Introducción gradual: si es la primera vez que incorporas estos ingredientes a tu rutina, es recomendable comenzar de manera gradual. Introduce un producto a la vez para permitir que tu piel se adapte antes de incorporar el siguiente.
● Elige el momento para aplicar cada activo: si quieres introducir ácido salicílico y niacinamida, es importante que sepas que el primero ha de aplicarse por la noche y el segundo se recomienda en tu rutina de mañana.
● Sigue el orden de aplicación: el retinol puede aplicarse por la noche, después del ácido salicílico y antes de la crema hidratante. No se recomienda su uso simultáneo con productos que contengan vitamina C.
● Uso de protector solar: dado que tanto la niacinamida como el retinol pueden aumentar la sensibilidad de la piel al sol, es esencial utilizar protector solar durante el día. Esto ayuda a prevenir el daño solar y protege la piel durante el uso de estos ingredientes.
● Observa la tolerancia: cada piel es única, por lo que es fundamental observar cómo responde la tuya. Si experimentas irritación, enrojecimiento o sequedad excesiva al combinar ácido salicílico y retinol, considera espaciar la aplicación de los productos o reducir la concentración.